Las enfermedades de transmisión sexual es un tema sumamente importante ya que forma parte de tener una vida sexual plena sin el riesgo de contraer alguna de estas infecciones. Por ende, es fundamental que todo aquel que mantenga actividades sexuales se informe correctamente sobre este tema y cómo pueden prevenirse de forma adecuada.
Recordemos que nuestra salud sexual y reproductiva es igual de importante que nuestro bienestar físico y psicológico. Así que, si deseas informarte sobre las enfermedades de transmisión sexual y cómo puedes protegerte de ellas, te invitamos a que leas el presente artículo. En las siguientes líneas explicaremos detalladamente qué son, cuáles son sus síntomas y mucho más.
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Tabla de Contenidos
¿Qué son las Enfermedades de Transmisión Sexual?
Para empezar, las enfermedades de transmisión sexual (ETS), se conoce como infecciones que se contagian de una persona a otra. Sucede usualmente durante el sexo anal, vaginal u oral, en efecto, son muy comunes y muchas personas que las contraen no presentan signos o síntomas.
Por esta razón, es importante hacerte exámenes de chequeo periódicamente sin importar si tienes síntomas de ETS o no. Una ventaja de estos exámenes es que no son complicados y la mayoría de las infecciones son fáciles de tratar. Ahora, si no obtienes un tratamiento, las infecciones de transmisión sexual, pueden causar serios problemas de salud.
En pocas palabras, las infecciones de transmisión sexual pueden ser producto de más de treinta tipos de virus, bacterias y parásitos. Del mismo modo, estas infecciones se pueden transmitir por sangre, semen, líquido preseminal o fluido vaginal.
En algunos casos, estas infecciones pueden transmitirse de forma no sexual. Por ejemplo, pueden contagiarse de madre a hijo durante el embarazo o parto, o a través de transfusiones de sangre o agujas compartidas.
¿Cuáles son las Enfermedades de Transmisión Sexual?
Si bien es cierto, se conoce más de 20 infecciones diferentes que pueden transmitirse por contacto sexual. De tal manera que, a continuación mencionaremos una lista que contiene las infecciones más comunes.
- Clamidia.
- Gonorrea.
- Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) o SIDA.
- Virus de Papiloma Humano (VPH).
- Sífilis.
- Tricomoniasis.
- Hepatitis B.
- Herpes genital.
- Vaginosis bacteriana.
- Piojos púbicos.
- Sarna Humana.
De modo consecutivo, describiremos brevemente algunas de estas enfermedades.
Clamidia
Es una infección de transmisión sexual común que puede ser asintomática. Sin embargo, puede afectar a personas de todas las edades. Suele ser más común en las mujeres jóvenes y en términos generales, las personas con clamidia no suelen presentar signos y síntomas. Por otra parte, igual pueden infectar a otras personas mediante el contacto sexual o fluido de líquidos corporales.
Gonorrea
La gonorrea es causada por una bacteria llamada neisseria gonorrhoeaae y puede crecer y multiplicarse de manera fácil y rápida en las áreas húmedas y tibias del aparato reproductor. De igual manera, como en la infección por clamidia, las complicaciones más comunes y graves de la gonorrea ocurren en las mujeres.
Asimismo, la gonorrea también puede infectar la boca, la garganta, los ojos y el recto y extenderse a la sangre y las articulaciones, donde puede convertirse en una enfermedad mortal.
Virus de Inmunodeficiencia Humana
Se conoce como el virus que causa el SIDA, también conocido como síndrome de inmunodeficiencia adquirida. Asimismo, el VIH destruye el sistema inmunitario del organismo al matar las células que combaten las infecciones. De tal forma que, una vez que el virus ha destruido un grupo considerable de dichas células, la capacidad del cuerpo para combatir las infecciones y recuperarse de las mismas se ve comprometida.
La transmisión del virus ocurre principalmente durante la actividad sexual sin protección y al compartir agujas para inyectarse drogas intravenosas, si bien el virus también puede transmitirse de la madre al bebé durante el embarazo, el parto y el amamantamiento.
Sífilis
Ahora, las infecciones por sífilis son causadas por una bacteria llamada Trponema Pallidum y se transmite de persona a persona durante el acto sexual vaginal, anal u oral. Esto sucede una vez que se tiene contacto directo con las úlceras que produce la enfermedad, las cuales se conocen como «chancros».
Estas úlceras suelen desaparecer por sí solas, incluso sin tratamiento. Sin embargo, el cuerpo no elimina la infección por sí solo y, con el tiempo, la sífilis puede afectar otros órganos como la piel, el corazón, los vasos sanguíneos, el hígado, los huesos y las articulaciones.
Síntomas
Las enfermedades de transmisión sexual pueden presentar distintos signos y síntomas, esto por supuesto, depende del tipo de infección. Inclusive, en algunos casos existe la ausencia de síntomas, de tal forma que, pueden pasar desapercibidas hasta que ocurren complicaciones.
En este sentido, mencionaremos algunos síntomas generales que pueden indicar una infección de transmisión sexual.
- Dolor o ardor al orinar.
- Flujo vaginal inusual o con olor extraño.
- Dolor durante relaciones sexuales.
- Sangrado vaginal inusual.
- Secreción del pene.
- Protuberancias en los genitales o en la zona oral o rectal.
- Dolor e inflamación de los ganglios linfáticos. Suele pronunciarse con frecuencia en la ingle, aunque a veces se extienden un poco más.
- Dolor en la parte inferior del abdomen.
- Fiebre.
- Erupción en el tronco, manos o pies.
Ahora bien, los signos y síntomas pueden aparecer unos días después de la exposición, o pueden pasar años antes de que tengas algún problema perceptible, según cada organismo. Por esta razón, es importante que visites periódicamente al médico y te hagas chequeos de salud. Recuerda que no necesitas esperar a presentar síntomas para ir al doctor.
Por otra parte, te invitamos a que leas un artículo de como puedes ejercer tu sexualidad de manera responsable y saludable sin necesidad de exponerte a factores de riesgo. Sólo debes hacer clic aquí.
Diagnóstico
Para el diagnóstico de las ETS o ITS, se necesita la realización de distintas pruebas y análisis específicos que determinan si una persona está contagiada o no. Por ejemplo, las pruebas consisten en muestras de orina, y análisis de sangre. En este caso, los exámenes de laboratorio pueden identificar la causa y detectar coinfecciones que también podrías tener.
- Análisis de sangre. Los análisis de sangre pueden confirmar el diagnóstico de VIH o las etapas posteriores de la sífilis.
- Muestras de orina. Algunas ITS se pueden confirmar por medio de una muestra de orina.
- Muestras de fluidos. Si tienes llagas genitales abiertas, el médico puede examinar el líquido y muestras de las llagas para diagnosticar el tipo de infección.
La mayoría de estas infecciones son tratables y muchas de ellas pueden curarse. Es importante mencionar que, si no se tratan, pueden producir diferentes problemas de salud. Es decir, de acuerdo al tipo de infección pueden producirse diferentes problemas de salud.
Por ejemplo:
- Problemas neurológicos.
- Aumenta la posibilidad de contraer Virus de Inmunodeficiencia Humana o también conocido como VIH.
- Infertilidad, tanto en hombre como en mujeres.
- Dolor crónico en la pelvis.
- Mayor riesgo de tener embarazo ectópico. Es decir, en una trompa.
- De igual forma, el VPH no tratado puede relacionarse con algún tipo de cáncer.
- Algunas personas pueden presentar cuadros generalizados, es decir, las consecuencias de la enfermedad se reflejan en todo el cuerpo.
- En otros casos, la ETS puede ser contagiada al bebé durante el embarazo, parto o cuando se amamanta.
¿Cómo Prevenir las Enfermedades de Transmisión Sexual?
En efecto, cualquier persona que sea sexualmente activa se arriesga a cierto grado de exposición a una enfermedad de transmisión sexual (ETS) o en su defecto, a una infección de transmisión sexual (ITS). De tal forma que, existen ciertos factores de riesgo que se deben tomar en cuenta y por supuesto, deben evitarse para poder disfrutar de una vida sexual saludable y responsable.
Por ejemplo:
- Tener relaciones sexuales sin protección.
- Contar con antecedentes de infecciones de transmisión sexual.
- Tener contacto sexual con varias parejas.
- Cualquier persona forzada a tener relaciones sexuales o algún tipo de actividad sexual.
- Hombres que solicitan medicamentos para tratar disfunción eréctil.
- Inyectarse cualquier tipo de droga.
En este sentido, la mayoría de estas enfermedades pueden prevenirse usando preservativo, bien sea masculino o femenino. O en su defecto, cualquier campo de látex, es importante mencionar que, debe utilizarse desde el comienzo y durante toda la relación sexual.
Sexualidad Bíblica
Según la Revelación Bíblica y la ciencia, la sexualidad humana no solo se trata de las diferencias anatómicas que dividen a los hombres y mujeres. En este sentido, la sexualidad es una dimensión de nuestro ser que nos conecta directamente con la raíz de nuestra existencia.
Desde el punto de vista cristiano, la sexualidad humana es parte de la convicción de que Dios es el creador de la humanidad. Es decir, la creación de los seres humanos incluye su sexualidad, los géneros masculino y femenino, la relación matrimonial íntima y el don de la procreación.
¡Gracias por leernos!, esperamos haberte informado correctamente acerca de las enfermedades de transmisión sexual.